Amo que no me veas, me siento especial.
Aunque no me leas
aún siendo quien miras y desprecias.
Quiero ser polvo óseo para evadir el dolor.
–¿Qué de reojo miro en mi vidrio?
Sucio de tanto escupirlo,
Confundido.
No me ven como me veo. No me leen como me leo.
No quiero ser polvo
de ahí vengo y ahí voy.